Deja de ser ecológico y empieza a resolver problemas
19/07/2019
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No necesitamos gente muy ecológica y muy concienciada, necesitamos soluciones sostenibles para problemas cotidianos. Las soluciones sostenibles (So-Sos) pueden aparecer cuando menos te lo esperas. Vamos a ver un ejemplo. Una madre tenía que hacer todas las mañanas varios kilómetros en coche para llevar a su hijo pequeño al colegio, combinando ese trayecto con el suyo propio al trabajo. Total, una larga distancia en coche con varias vueltas y revueltas, posiblemente metida en un atasco junto a otros padres y madres, necesidad de gran madrugón, poco tiempo para desayunar, etc. Esto se convierte en un problema. Una posible solución es sacar a su hijo del lejano colegio concertado o privado y matricularlo en el colegio del barrio, a donde el niño podría llegar andando relacionándose con sus amigos, o hablando con su madre, en pocos minutos. Otra solución sería una ruta en autobús que se encargue de recoger a los escolares en sus domicilios o cerca y de llevarlos al colegio. La primera solución es la más sostenible, y la más ahorradora. La segunda no sería tan económica, pero también supone ventajas. Al retirar un trayecto en coche de la saturada circulación urbana, menos atascos y menos contaminación, más salud para todos.
Esta es la idea general de las Soluciones Sostenibles para Problemas Cotidianos: pararnos a pensar un poco si no nos estamos complicando la vida innecesariamente, haciendo cosas que no nos gusta hacer, y que encima son caras y contaminantes, y que igual no tienen razón de ser. Y a continuación plantear alternativas y elegir las mejores soluciones.
Ya entrando en el mundo real, hay soluciones sostenibles para todos los problemas de la vida cotidiana. Fulano era un gran devorador de carne, y también un visitante frecuente del médico, amenazado por muchos problemas en ciernes de colesterol, obesidad, ácido úrico, gota y así. La solución sostenible en este caso fue hacerse flexitariano. Armado con un libro de recetas, se dedicó a elaborar recetas 90% vegetales y 10% animales, por ejemplo un salmorejo cordobés con unas lascas de jamón y un poco de huevo duro picado. Resultados: fulano visita menos al médico y gasta menos en comida, además de divertirse mucho cocinando. Incluso el planeta sale ganando, la producción de carne tiene una huella ecológica enorme.
Zutano es adicto a comprar ropa en las tiendas de grandes marcas. Es tan adicto que se está quedando sin dinero y sin sitio en casa para guardar tanto tonelaje de ropa de mala calidad. Solución sostenible: abandonar la moda efímera, que cambia todas las semanas (fast fashion), y adoptar la moda intemporal, que no cambia (slow fashion). Zutano ha descubierto además las tiendas de segunda mano de ropa, de muy buena calidad y muy buenos precios. Resultados: está ahorrando mucho dinero, tiene tiempo libre por primera vez en la vida, le sobra espacio en casa y se ha convertido en un influencer respetable, alguien de cuyo criterio puedes fiarte. Incluso el planeta gana, al reducir la masa de ropa de mala calidad entretejida de poliéster que contamina la tierra y las aguas.
Hay miles de soluciones sostenibles, una o varias para cada problema cotidiano. Si tu trabajo está a menos de 2 kilómetros de tu casa, puedes ir caminando. Esto implica hacer ejercicio y ahorrar dinero, amén de mejorar la ciudad. Para la ropa no muy sucia, un poco de jabón Lagarto rallado en agua caliente es suficiente para dejarla como los chorros del oro. Te quitas el problema del elevado gasto en detergentes y suavizantes, que son muy caros, y reduces la contaminación de las aguas. Tiempo de elaboración: dos minutos. Para limpiar un suelo de madera, basta con pasar la escoba o la mopa y pasar la fregona remojada en agua con un toque de vinagre si tiene alguna mancha o si se nos ha caído algo al suelo. Evitas tener que comprar abrillantadores de suelos, manejar una aspiradora, amaestrar a un robot de limpieza, etc.
Un ventilador barato y enfriar bien la casa con el fresco de las primeras horas del día puede evitarte el problema del gasto de una instalación de aire acondicionado. Ventilar lo justo en invierno y mantener luego todo bien cerrado hará que no necesites una instalación potente y cara para mantener tu casa confortable. Un calentador de 30 litros es una solución sostenible para una casa pequeña. En todos los casos, se produce un ahorro de dinero, a veces instantáneo, a veces tras un plazo razonable (como ocurre con el ahorro en energía para climatización tras instalar ventanas de doble cristal). También mejora nuestra salud y, en general, nuestro ambiente social y la vida de nuestros vecinos (así ocurre si dejamos de dormir a 12ºC con el acondicionador de aire funcionando a plena potencia toda la noche). Y además nuestro planeta mejora, al reducirse nuestra huella ecológica.
Seguro que conoces unas cuantas soluciones sostenibles: envíanoslas y las añadimos al catálogo. No te guardes esa valiosa información. Describe tu problema y después cómo lo estás resolviendo de manera sostenible.
Jesús Alonso Millán
Fotografía: Brian Yurasits en Unsplash