La ISO 14001 cumple 20 años completamente renovada: la versión 2015
21/09/2016
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La norma ISO 14001 cumple veinte años en 2016. A lo largo de estos cuatro lustros, ha demostrado su éxito al proporcionar un molde donde las empresas pueden verter sus esfuerzos en pro de un medio ambiente mejor. La 14001 no establece obligaciones vinculantes: hace algo más importante, al proporcionar un guión de trabajo general y estandarizado que cualquier organización, sea cual sea tu tamaño, puede seguir.
En la práctica, la ISO 14001 ha ayudado a miles de empresas y organizaciones de lo más variopinto a controlar sus impactos ambientales, medirlos, minimizarlos, reducir gastos, mejorar su comunicación ambiental y en general a dar pasos importantes hacia la sostenibilidad. La experiencia muestra que no existe en el mundo una norma de gestión ambiental tan aceptada como la 14001, que ha venido a homogeneizar criterios y a facilitar procesos de producción limpios, más eficientes y con una huella ambiental más reducida.
Muchos se preguntan: ¿cuánto tardaré en implantar la 14001 en mi empresa?, pero la pregunta correcta es: ¿con cuánta gente y recursos y con qué disposición de la alta dirección se cuenta para implantar? No obstante, si queremos dar un plazo de manera general, hablaremos de un año. Otros muchos piensan que implantar una 14001 supone el acopio de mucha documentación y una cierta sobrecarga administrativa. Eso puedo tener parte de verdad al comenzar el proceso, pero se aligera mucho en cuanto el sistema empieza a rodar. Además, la nueva versión 2015 permite que la organización diseñe su propios procedimientos a medida. Hay otras novedades interesantes en la versión 2015.
La última versión de la ISO 14001 agiliza los requisitos para evaluar la conformidad. Ya no es necesario que las organizaciones tengan evaluaciones de conformidad por parte de auditores externos o de buscar registros y certificaciones del sistema de gestión ambiental. Una organización puede simplemente “realizar una autodeterminación y una autodeclaración”. Naturalmente, si lo desea, puede requerir la participación de aportes externos, auditores y certificadores.
La versión 2015 insiste en la concepción de ciclo de vida, al incluir el sistema de adquisición de materias primas hasta su disposición final, mientras que antes se hablaba solo de lo que pasaba dentro de la instalación. Lo cual viene al pelo para que las organizaciones se acerquen a dos nuevos e importantes conceptos como la economía circular y la medición de huella ambiental.
Otra novedad es la inclusión en el contexto de la organización de partes interesadas tanto externas como internas –antes solo se tenía en cuenta al núcleo de la organización. Así el alcance del sistema de gestión ambiental incluye necesidades y expectativas de los stakeholders o grupos de interés que representen claramente el entorno social y ambiental de la organización.
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